Pasan los discos y los años, y Kings of Convenience prosigue su andadura sin sobresaltos estilísticos, haciendo de la mesura una virtud que le ha llevado a firmar Peace Or Love, un trabajo bucólico donde las hechuras acústicas son más pastorales que nunca.
Que: Disco (EMI/Universal)
Es arrancar con Rumours, primer peldaño de este LP de Kings Of Convenience, y darnos cuenta de estar ante un trabajo amasado con máxima dulzura y una preocupación especial por avivar una atmósfera crepuscular, aquí elevada al cubo en la deliciosa Rocky Trail, donde un violín llorón de fondo amplia los contornos azules de una pequeña obra maestra.
Obra maestra acompañada de otras diez postales otoñales, donde asoma el espectro del Nick Drake más desnudo en cortes como Comb My Hair. Muestras como esta última definen la pauta recogida de un trabajo armado con elementos mínimos y siempre desde el contraplano de la máxima fragilidad.
No se puede decir lo contrario ante muestras de cristal fino como Angel, que nos recuerda a una versión esquelética de Prefab Sprout. En otras como Love Is a Lonely Thing la desnudez es máxima, voz y acordes lánguidos acústicos para también acompañar la aparición estremecedora de Feist.
La propia Feist también aparece en Catholic Country, donde se juega con la saudade acústica minimal en plan Weekend. En todo momento, la predisposición tira hacia el enfoque microscópico de referentes pop tan perfeccionistas como pueden ser los Bee Gees disco, a quienes metamorfesean en un episodio hogareño mediante la bella Fever.
Es memorable la habilidad que tienen Erlend Øye y Eirik Glambek Bøe para jugar con dobles capas de referencias. También cuando se dejan empapar sin más por Simon & Garfunkel, tal que en Ask For Help, otro de los frutos más sabrosos de semejante invitación al retiro al abrigo de una buena chimenea en invierno.
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