Finlandia – Monsp, 2014
Esta excursión sobrecogedora al submundo de los tejidos electrónicos y la poesía hiphopera es un álbum realmente oscuro. Es el esfuerzo combinado de dos pesos pesados de la música urbana actual de Finlandia: RPK (alias Roope K) ha sido un pionero en el lado más experimental de la escena hip hop finlandesa desde los 90, y Khid (alias (DJ Kridlokk) está rompiendo moldes como la figura fundamental de la nueva ola de artistas que combinan poesía y beats. Los dos productores y raperos, sobrados de talento en varios campos, son conocidos por arriesgarse en la búsqueda de su propio camino en el cambiante territorio de la música electrónica contemporánea. En Ei se puede apreciar una influencia del sonido grime, tan popular en el Reino Unido, pero es apenas una capa, un punto de partida. RPK pinta imágenes con sonidos tan siniestros como emotivos, y las letras de Khid son incisivas y creíbles: una mezcla perfecta para una producción inquietante. No hay clichés: más bien una dosis insólita de poesía callejera y electrónica, que nos recuerda el potencial creativo que subyace bajo la rancia superficie del hip hop de masas que domina las listas.
Este texto es parte del informe 120 discos nórdicos indispensables.